Internacionalizar la empresa
Exportar
Aunque todas las empresas, parece que tienen claro que la exportación es fundamental para el crecimiento de las mismas, únicamente las grandes son las que realmente se lo toman en serio. Aunque hay excepciones, como comentaremos más adelante, pero el panorama entre la pequeña y mediana empresa en el mundo de la exportación es bastante desolador.
La internacionalización de empresas no solamente aumenta las ventas si no que garantiza la supervivencia de las mismas. Las empresas con tradición exportadora tienen muchas más posibilidades de permanecer en el tiempo. Ello es debido a que los mercados son cambiantes. Cambios de tendencias, crisis económicas… Si nuestro mercado es global tenemos muchas más posibilidades de compensar los desequilibrios que se puedan dar.
Un ejemplo de lo que estamos comentando es la empresa Talsa (Talsabell, S.A.), fabricante de maquinaria para la industria cárnica y chacinera. Una empresa con más de 100 años de existencia que desde el principio supo apostar por la innovación, invirtiendo en investigación y desarrollo y lo que es más importante, por la apertura de nuevos mercados. La proyección internacional de Talsa la convierte en una de las primeras empresas internacionales en su segmento de fabricación de maquinaria de calidad para la industria cárnica y chacinera. Embutidoras, amasadoras, picadoras, moledoras, cutters y marmitas de cocción de mediana capacidad de la marca Talsa, son reconocidas a nivel mundial. No por casualidad la página Web de Talsa está desarrollada en seis idiomas.
No es objeto de este post indicar los pasos a seguir para la internacionalización de empresas, cada empresa tiene sus propias particularidades y deberá tomar unas medidas personalizadas pero si que hay unas mínimas líneas de actuación que nos ayudarán en esa importante tarea:
– Conocimiento de los mercados en el exterior.
– Adecuación de nuestra estructura empresarial e inversión en I+D+i.
Los más importante, la voluntad de querer exportar.